Durante un gran viaje te puedes encontrar alojamientos de todo tipo, es importante ser flexible y no tener unas expectativas demasiado elevadas, porque suele pasar que sabes dónde duermes la noche actual pero no la próxima. Hay veces que tienes la suerte de alojarte en lugares increíbles de los que no quieres salir, es el momento de disfrutarlo al máximo, ya que no son muy comunes.Te contamos nuestra experiencia para alojarte durante la vuelta al mundo.
Alojarte durante la vuelta al mundo
Nosotros, por suerte, no tenemos muchas manías a la hora de dormir, pero si no tienes esa suerte te recomendamos que en tu equipaje lleves siempre un antifaz y unos tapones para los oídos, si te olvidaste de ellos siempre estás a tiempo de pedirlos en un vuelo transoceánico. También te recomendamos llevar un insecticida a mano, y no solo para los mosquitos.
Nosotros hemos compartido habitación con muchos tipos de criaturas, dejando aparte personas que dan para otro relato, contamos entre nuestros “acompañantes” con mosquitos, cucarachas (algunas casi tan grandes como un bebé), lagartos, arañas, ranas, chinches,… y seguramente muchos otros qué no sabemos y creemos que mejor así.
Hemos hecho un ranking de peor a mejor en cuanto a alojamientos que te puedes encontrar en una vuelta al mundo o un gran viaje o un viaje por libre, como quieras llamarlo 🙂
Diferente tipos de alojamiento
En la calle
No es plato de buen gusto encontrarse sin cobijo, pero puede pasar que ya sea porque no encuentras un lugar, porque el que encuentras se salga de tu presupuesto o porque tu transporte llegue a las tantas de la mañana te tengas que ver en esta guisa. Aquí es cuando te alegras de haber incluido en tu equipaje un saco de dormir. Es bastante importante que te encuentres en un lugar cercano al trópico, porque no nos imaginamos esta posibilidad en la estepa rusa.
Lo más incómodo, además de la inseguridad que genera estar desamparado, es dónde metes tu mochila para que al día siguiente continúe en tu poder. Acabas utilizando esos candados que te das cuenta que durante el viaje van a ser más que imprescindibles. Si viajáis acompañados cabe la opción de ir durmiendo a turnos.
La ventaja es el coste, que evidentemente es 0€
En un aeropuerto
A efectos prácticos es exactamente lo mismo que el apartado anterior con las ventajas de estar más seguro, al menos eso nos gusta creer, estar bajo techo y si tienes un día de buena suerte, que hay veces que pasa, encontrar una serie de asientos que tu mente enseguida los convierte en una cama. Suelen ser lugares ruidosos y con mucha luz. Otra de las ventajas es que si es un transfer entre destinos tus mochilas están bajo custodia en la línea aérea.
El coste sigue siendo 0€ aunque ya has pagado lo tuyo en el billete.
Si tienes la oportunidad de coger un vuelo de primera hora de la mañana puedes irte por la tarde-noche y pernoctar allí. Te ahorras la media noche de alojamiento y el taxi que tendrás que coger ya que a esas horas no suele haber transporte público.
En un Night Bus o tren nocturno
Depende del país, puede ser más o menos cómodo ya que por ejemplo en Argentina o Sudáfrica son buses en los que parece que vueles en primera clase, pero en Vietnam o Tailandia te encuentras un poco encajonado. No olvides nunca llevar una manta contigo -gracias Fiji Airlines- sobre todo en Asia, ya que suelen poner el aire acondicionado a unas temperaturas inhumanas, y recuerda también llevar algo que puedas comer tipo galletas porque no hay nada peor que intentar dormir con el estómago rugiendo.
En lo que a trenes se refiere, aconsejamos los de litera, ya que tuvimos la experiencia de viajar en China en un tren con asientos rígidos y ya te puedes ir preparando a pasar una noche en vela porque puede que sea la forma más incómoda de dormir…
Couchsurfing (en el suelo)
Sí, a veces te toca un anfitrión al que se le ha ido de las manos y tiene más invitados que sofás, entonces no tienes más remedio que apañarte con lo que hay, en ese caso el suelo. Intenta poner mantas y lo que puedas para hacer de esa noche lo más cómoda posible.
Hostel de 5€
“Haberlos haylos”, aunque te puedes imaginar que es donde más compañeros hemos tenido. Historias para no dormir, como, ir al hospital al día siguiente por haber dormido en lo que parecía una cama pero resultó ser un nido de chinches, estar a tal temperatura que dormías por turnos cuando te llegaba el aire del ventilador rotativo -es decir cada minuto dormir 20 segundos- dormir con cucarachas que después de recibir su correspondiente baño de insecticida se esconde bajo la mesita de noche y, de la fuerza que tenía, era capaz de levantarla!!!, también dejamos para otro relato el tema baños porque no acabaríamos.
Eso sí, al día siguiente estas satisfecho de haber gastado 5€ entre dos personas y la cantidad de historietas que te llevas contigo.
Tienda de campaña
Nosotros solo las utilizamos en África y la verdad que lo único malo es que resulta un poco incómodo por dimensiones y el tiempo que requiere su montaje, pero tiene la ventaja de dormir en plena naturaleza y con un techo de miles de estrellas. Siempre tienes el miedo de que animales más grades que los mosquitos tengan curiosidad por ti y te peguen un susto, aunque siempre te dicen que es muy seguro, escuchar una hiena en medio de la noche no te tranquiliza nada.
Hostel Medio
La gran mayoría de las noches las pasas en este tipo de alojamientos. Tienes la ventaja de poder cocinar en ellos y coincidir con mucha gente de cualquier punto del mundo que suele tener tus mismas aficiones e inquietudes.
Los precios dependen de la zona, siendo el sudeste asiático la estrella, como siempre que hablamos de costes.
Couchsurfing
En condiciones normales, para nosotros Couchsurfing se sitúa en el Top 3, todas las ventajas de un hostel a precio 0, incluso puedes tener la suerte de que te toque un host superior, nos hemos encontrado lugares con piscina privada, lugares que parecen un hotel con desayuno incluido o lugares con vistas a sitios emblemáticos de la ciudad. También tienes la ventaja de coincidir con alguien que te puede dar muchos consejos sobre su ciudad e incluso enseñártela él/ella mismo.
Hotel
No tienes la posibilidad de cocinar, pero el confort de un hotel suple este hecho. Además depende qué países te sale más barato comer en la calle que comprar comida en el super para hacer 2 o 3 comidas.
Hotel de lujo
Estamos hablando de palabras mayores, no solo tienes confort, sino también una serie de servicios, una calidad (parece una tontería, pero encontrar toallas mullidas, te puede alegrar el día) y una higiene muy lejos de lo que estás acostumbrado. Lugares como Movenpick, Mai Chau o Gondwana Game Reserve hicieron en su momento que las estancias fueran inolvidables y tuviéramos un conato de depresión cada vez que teníamos que hacer el check out de lugares como estos.
Este es nuestro ranking, y algo de lo que nos hemos dado cuenta es la capacidad que tiene el ser humano para adaptarse y bajar el listón de comodidad. Durante el viaje llegamos a buscar alojamiento simplemente con la prioridad de que tuviera wifi, todo lo demás nos acostumbramos a tolerarlo.