Qué ver en Malta en 7 días con niños: Ruta sin coche por las islas maltesas

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Aquí te cuento qué ver en Malta en 7 días, cómo moverte sin coche y qué merece la pena si viajas con niños, con recomendaciones basadas en nuestra experiencia real.

Viajamos a Malta en septiembre, cuando el calor todavía invita a bañarse en el mar pero la isla ya se ha medio vaciado de los grupos de verano. Durante nuestra semana en Malta recorrimos el país con nuestra hija, de casi dos años. En este viaje a Malta con niños combinamos playas, historia y paisajes mediterráneos, todo sin alquilar coche.

Malta es un destino perfecto para una semana: es compacta, muy fácil de recorrer en transporte público y concentra en pocos kilómetros tres islas llenas de encanto —Malta, Gozo y Comino— donde se mezclan influencias árabes, italianas y británicas. Cada día nos sorprendió con algo distinto: ciudades amuralladas, pueblos pesqueros, acantilados, playas de aguas turquesas y mucha vida local.

que ver en malta

Viajar sin coche y con una niña pequeña nos obligó a movernos con más calma, pero eso también nos permitió descubrir una Malta más slow, más local y, curiosamente, más auténtica.

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Qué ver en Malta en 7 días

Si estás planeando un viaje a Malta de una semana, este itinerario de 7 días te servirá para descubrir lo mejor del país sin prisas, combinando playas, pueblos con encanto y rincones históricos. Nuestra idea era aprovechar al máximo Malta sin coche, moviéndonos en ferry y transporte público, algo totalmente posible y cómodo si organizas bien las rutas.

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En estos 7 días exploramos dos de las tres islas maltesas —Malta, Gozo y Comino— con tiempo para disfrutar de forma tranquila. Te dejo a continuación nuestra ruta día a día, con recomendaciones reales sobre qué ver en Malta en una semana, dónde dormir y cómo moverte de un lugar a otro si viajas en familia o sin vehículo.

Estos son nuestros imprescindibles de Malta que ver:

Día 1: Llegada a La Valeta

Nuestro viaje a Malta comenzó en el aeropuerto internacional de Malta (MLA), situado a tan solo 8 kilómetros de La Valeta, la capital. Si viajas sin coche, llegar es muy sencillo: hay autobuses directos que conectan el aeropuerto con el centro (líneas X4 o TD2, entre 25 y 40 minutos según el tráfico), aunque también puedes optar por un traslado privado o taxi si prefieres comodidad, sobre todo viajando con niños o con equipaje si aterrizas demasiado tarde, como fue nuestro caso.

Una vez instalados, lo ideal es dedicar la tarde a dar un primer paseo por La Valeta. Sus calles empedradas, los balcones de madera y las vistas al mar te hacen sentir de inmediato que has llegado a un lugar con carácter. Aprovecha para recorrer parte de la Republic Street, asomarte a los Upper Barrakka Gardens al atardecer y cenar en alguna terraza con vistas al puerto. Es la manera perfecta de empezar a conectar con el ritmo tranquilo de Malta.

Dónde dormir en La Valeta o Sliema

Durante nuestra estancia nosotros nos alojamos en otra localidad gracias a un intercambio de casas con HomeExchange, pero si tuviera que elegir, sin duda me quedaría entre La Valeta o Sliema, las dos mejores zonas donde dormir si no alquilas un coche.

  • Dormir en La Valeta tiene el encanto de estar en pleno centro histórico, con todo a pie y un ambiente único cuando cae la tarde. El contra es que los alojamientos son más caros.
  • Dormir en Sliema, justo enfrente de La Valeta (conexión por ferry de 10 minutos), más opciones de restaurantes, tiendas y hoteles con vistas al mar. Es ideal si prefieres algo más económico  manteniendo la cercanía al corazón de la isla

Ambas zonas son perfectas para empezar a explorar, así que puedes decidir según tu estilo de viaje: La Valeta si te gusta el encanto local y el ambiente más auténtico, o Sliema si priorizas la comodidad y la oferta hotelera.

Día 2: La Valeta y las Tres Ciudades

El segundo día lo dedicamos a descubrir La Valeta con calma, una de esas capitales europeas pequeñas pero llenas de historia.

malta con niños

Pasear por sus calles es como retroceder en el tiempo: la St. John’s Co-Cathedral impresiona por dentro, con su interior dorado y las obras de Caravaggio; los Upper Barrakka Gardens ofrecen unas de las mejores vistas del Gran Puerto; y caminar por la Republic Street o la Merchant Street permite disfrutar del ambiente local entre cafeterías, tiendas y edificios con encanto.

La mejor forma de explorar este lugar, es a través de un Free Tour como la que puedes ver aquí.

Esta excursión te llevará a descubrir puntos clave de La Valeta.

tres ciudades de Malta

A mediodía, una forma preciosa de seguir explorando sin prisas es cruzar en ferry desde La Valeta hasta Las Tres Ciudades (el trayecto dura apenas 10 minutos y cuesta 1,50 €). Frente a la bulliciosa capital se extienden Birgu (Vittoriosa), Senglea y Cospicua, tres antiguas fortificaciones llenas de historia, callejones de piedra y balcones coloridos, pero con una gran diferencia: aquí no hay apenas turistas.

Para nosotros, fue uno de los grandes descubrimientos del viaje. Mientras en La Valeta coincides con los pasajeros de los cruceros, en las Tres Ciudades sientes la Malta más auténtica y serena. Paseamos sin rumbo por las calles estrechas y empedradas de Birgu, entre fachadas de piedra dorada, balcones de colores y puertas decoradas con los típicos aldabones malteses. Apenas había turistas, si buscas rincones con alma y calma, este es uno de los mejores lugares que ver en Malta.

Día 3: Mdina y Rabat, lo más bonito del interior de Malta

El tercer día lo dedicamos al corazón histórico de la isla: Mdina y Rabat, dos localidades vecinas que conservan todo el encanto del Malta más tradicional.

calles de mdina malta

Mdina, conocida como la Ciudad del Silencio, fue la antigua capital y hoy es un pequeño laberinto de calles peatonales y murallas medievales perfectamente conservadas.

Pasear por sus callejones estrechos, donde solo se oyen las pisadas sobre la piedra, es una experiencia mágica. No es casualidad que aquí se rodaran algunas escenas de Juego de Tronos, lo que añade aún más atractivo a sus rincones de aire medieval. Desde las murallas se obtienen algunas de las mejores vistas del interior de Malta, especialmente al atardecer.

Justo al lado, Rabat ofrece una versión más local y auténtica, con cafeterías familiares, pequeñas tiendas y las famosas catacumbas de San Pablo. Fue una de las jornadas más agradables del viaje. 

Tanto Mdina como Rabat son lugares tranquilos y cómodos para visitar con niños. Nara disfrutó caminando por las calles sin coches, persiguiendo gatos y probando un helado artesanal mientras nosotros nos dejábamos llevar por el ritmo pausado del lugar.

que ver en malta en 7 días con niños

Si solo tienes un día para conocer el interior de Malta, Mdina y Rabat son imprescindibles: historia, encanto y calma en un mismo paseo.

Día 4: Playas del norte de Malta — Golden Bay y Mellieha

El norte de Malta concentra algunas de las mejores playas de la isla, y merece al menos un día en tu itinerario. Si viajas sin coche, nuestro consejo es dedicar esta jornada a disfrutar de Golden Bay y Mellieha, dos zonas perfectas para combinar mar, paisaje y descanso antes de poner rumbo a Gozo.

Golden Bay es una de las playas más bonitas y accesibles de Malta: una amplia bahía de arena dorada, con aguas tranquilas y servicios a pie de playa, ideal para familias. Es fácil pasar aquí varias horas entre baños, castillos de arena y algún paseo por los acantilados cercanos.

Un poco más al norte, el pueblo de Mellieha ofrece otra playa fantástica, Mellieha Bay, con aguas poco profundas perfectas para niños pequeños. Además, el pueblo tiene encanto y buenas opciones para comer con vistas al mar.

Playas de Malta

Nosotros optamos por dedicar dos noches a Gozo, pero una buena alternativa si haces el viaje sin coche es pasar este día en Golden Bay y Mellieha, y después aprovechar la cercanía para coger el ferry a Gozo desde Cirkewwa (es el puerto desde donde también salen las excursiones a Comino).

Moverse por esta zona en transporte público es posible, aunque hay que tener en cuenta que los trayectos en bus pueden ser largos y algo lentos. Desde La Valeta, por ejemplo, el viaje a Golden Bay puede llevar entre 1 hora y 30 minutos y 2 horas, dependiendo del tráfico y las conexiones. Conviene salir temprano y tener paciencia: las vistas de la costa y el baño final merecen la pena.

Días 5 y 6: Gozo, la isla más tranquila de Malta

Gozo es la segunda isla del archipiélago maltés y, para muchos, la más especial. Más verde, más rural y mucho más tranquila que la isla principal, es el lugar perfecto para bajar el ritmo y disfrutar de un viaje slow, especialmente si viajas con niños.

Llegar hasta aquí sin coche es sencillo, aunque requiere un poco de planificación. El ferry a Gozo sale del puerto de Cirkewwa, en el extremo norte de Malta, y tarda unos 25 minutos en llegar a Mgarr, el puerto principal de la isla. Si viajas en bus, lo ideal es combinar esta visita con las playas del norte (Golden Bay o Mellieha) el día anterior, para no hacer el trayecto desde La Valeta del tirón, ya que puede superar las 2 horas. Una vez en Gozo, hay una buena red de autobuses públicos que conectan los principales puntos turísticos.

Lo más destacado que ver en Gozo

El corazón de la isla es Victoria, donde se alza la impresionante Ciudadela, una fortaleza en lo alto de una colina desde la que se domina toda la isla. Sus murallas, callejones empedrados y pequeñas cafeterías son un lugar ideal para perderse sin prisa. Cerca de allí, la zona de Dwejra ofrece uno de los paisajes más emblemáticos de Gozo, con sus acantilados y la famosa Blue Hole, muy popular entre los buceadores.

Si buscas playa, Ramla Bay es la más conocida, con su arena rojiza y aguas limpias, perfecta para pasar una tarde tranquila. También merece la pena explorar algún pueblo costero como Xlendi o Marsalforn, ambos con mucho encanto y buenas opciones para comer frente al mar.

En Gozo todo se vive a otro ritmo: sin prisas, sin grandes distancias y con un ambiente local que invita a relajarse. Para nosotros fue una de las partes más agradables del viaje. Nara disfrutó muchísimo porque aquí pudo moverse libremente, jugar en la arena y descubrir una Malta más rural y auténtica.

Si te apetece un plan tranquilo, puedes pasar la mañana en la playa de Ramla Bay, de arena rojiza y aguas poco profundas, ideal para ir con niños. También puedes acercarte a Xlendi, otro rincón muy agradable donde darte un baño, caminar por el paseo marítimo o almorzar en alguno de los restaurantes frente al mar.

Otra opción muy recomendable es hacer una excursión a las salinas de Marsalforn, donde el paisaje se vuelve casi lunar. Estas salinas, talladas a mano en la roca junto al mar, siguen utilizándose hoy en día para la producción artesanal de sal y son uno de los lugares más fotogénicos de Gozo. Se puede llegar en bus o con un tour organizado, que además suele incluir paradas en otros puntos de la isla como Dwejra o la Ciudadela.

Por la tarde, tomamos el ferry de regreso a Malta, una travesía corta y agradable que ofrece vistas preciosas al atardecer. Fue el cierre perfecto para nuestra escapada a Gozo, donde sentimos que realmente habíamos podido bajar el ritmo y conectar con la esencia más tranquila de Malta.

Día 7: Últimos paseos por Sliema o Marsaxlokk y regreso a casa

Nuestro último día en Malta lo tomamos con calma. Si te alojas en Sliema, una buena opción es dar un paseo por su paseo marítimo, disfrutar de las vistas hacia La Valeta y quizás darte un último baño en alguna de las plataformas naturales de roca que bordean la costa. Es un plan sencillo y relajado, perfecto para cerrar el viaje sin prisas.

Si tu vuelo es por la tarde y coincide en domingo, merece mucho la pena acercarse al mercado de Marsaxlokk, un pequeño pueblo pesquero en el sureste de la isla. Sus tradicionales barcas de colores —los luzzus— son una de las imágenes más icónicas de Malta, y el ambiente del mercado, con puestos de pescado fresco y artesanía local, tiene un encanto especial. Desde Sliema o La Valeta puedes llegar fácilmente en bus, aunque conviene salir temprano para aprovechar la mañana.

Después de comer, toca poner rumbo al aeropuerto. Desde La Valeta o Sliema el trayecto en transporte público suele tardar unos 45 minutos, así que es mejor calcularlo con margen. Así terminó nuestra semana en Malta: un viaje sin coche, con ritmo slow y lleno de paisajes, historia y momentos tranquilos en familia.

Qué ver en Malta (mapa + resumen por zonas)

Si te estás preguntando qué ver en Malta en un primer viaje, este resumen por zonas te ayudará a ubicar los lugares más interesantes y planificar tus días según tus intereses. Malta es un país pequeño, pero cada zona tiene una identidad propia: desde los palacios y miradores de La Valeta hasta las calas tranquilas de Gozo.

Si viajas sin coche (como fue nuestro caso), este mapa interactivo con los principales puntos marcados te servirá para organizar tus rutas de forma lógica y evitar trayectos innecesarios.

La Valeta y alrededores

La capital maltesa es una joya histórica y el punto de partida ideal para explorar la isla. En La Valeta no te pierdas la Co-Catedral de San Juan, los Jardines Upper Barrakka con sus vistas al Gran Puerto, y sus calles empedradas repletas de balcones coloridos.

que ver en la valeta

Desde aquí puedes hacer una excursión en ferry a Las Tres Ciudades (Birgu, Senglea y Cospicua), una zona encantadora y mucho más tranquila que el centro, donde aún se siente la auténtica vida local maltesa.

Centro de Malta (Mdina, Rabat, Dingli Cliffs)

El corazón de la isla combina historia, vistas panorámicas y un ritmo mucho más pausado. Mdina, la antigua capital amurallada, es uno de los lugares más bonitos que ver en Malta —y también un escenario de Juego de Tronos.

A pocos pasos, Rabat ofrece un ambiente más local, con cafés familiares y callejones donde pasear sin prisas. Si te apetece algo de naturaleza, los acantilados de Dingli regalan algunas de las mejores vistas al mar.

malta con niños

Norte de la isla: playas de Malta

El norte concentra las mejores playas de Malta, ideales para pasar un día relajado antes o después de visitar Gozo. Golden Bay y Mellieħa Bay son dos de las más accesibles en transporte público, con servicios, arena dorada y opciones para comer cerca.

Desde esta zona también se toma el ferry hacia Gozo y Comino, por lo que es perfecto incluir aquí una parada antes de cruzar a las islas vecinas.

ferry gozo malta

Isla de Gozo

Más verde, rural y tranquila, Gozo es la versión más relajada de Malta. Su capital, Victoria, destaca por la Ciudadela, una fortaleza con vistas espectaculares. También merecen una visita Dwejra Bay (donde estuvo la famosa Azure Window) y las salinas de Marsalforn.

Si viajas con niños, Gozo es ideal: hay menos tráfico, las distancias son cortas y se respira un ambiente “slow” que invita a disfrutar sin prisas.

isla de gozo

Comino y Blue Lagoon

La pequeña isla de Comino es conocida por la Blue Lagoon, uno de los lugares más fotografiados de Malta. Sin embargo, también es uno de los más masificados en verano.

Si viajas fuera de temporada o puedes ir temprano por la mañana, vale la pena disfrutar de sus aguas turquesas. Pero si viajas con niños o prefieres planes tranquilos, te recomiendo priorizar Gozo o las playas del norte de Malta, que ofrecen una experiencia más auténtica y cómoda.

Cómo moverse por Malta sin coche

Si te estás planteando viajar a Malta sin coche, tengo buenas noticias: es totalmente posible recorrer la isla utilizando el transporte público, especialmente si planificas bien las rutas. Eso sí, conviene ir con paciencia, ya que las distancias no son largas, pero los trayectos pueden ser lentos por el tráfico y las carreteras estrechas.

Transporte público en Malta: bus + ferry + app Tallinja

El sistema de autobuses de Malta cubre prácticamente toda la isla y también conecta con Gozo mediante ferry. La aplicación Tallinja es imprescindible: te permite consultar horarios en tiempo real, planificar tus trayectos y recargar la tarjeta de transporte.

Los autobuses funcionan con frecuencia razonable durante el día, depende de qué zonas, y los fines de semana o por la noche pueden espaciarse bastante. De hecho, solo te recomiendo usar el transporte público para moverte por Malta con niños si, como nosotros, tu peque se marea en el coche y no te queda otra. Aunque es cierto que la isla está totalmente conectada, los buses son muy lentos y las frecuencias escasas.

transporte público en malta

Entre La Valeta y Sliema, o hacia Las Tres Ciudades, una alternativa muy agradable es el ferry, que ofrece trayectos cortos, vistas preciosas del puerto y suele ser más rápido que el bus.

Ventajas y limitaciones del transporte público

Moverse por Malta sin coche tiene ventajas: te olvidas de buscar aparcamiento, no te enfrentas al tráfico y los trayectos son económicos. Además, la red está bien conectada con los principales puntos turísticos.

La principal limitación es el tiempo de desplazamiento: para llegar desde La Valeta hasta el norte (por ejemplo, Mellieħa o el ferry a Gozo) puedes tardar más de hora y media. Por eso, si tu itinerario incluye varias zonas, te recomiendo agrupar las visitas por áreas para evitar pasar demasiado tiempo en el bus.

Viajar con bebé a Malta: Práctico y cómodo

¿Por qué Malta es ideal para familias?

Viajar a Malta con niños fue una experiencia preciosa y mucho más fácil de lo que imaginábamos, superó con creces nuestras expectativas. Nuestra hija Nara tenía casi 2 años y se adaptó fenomenal al ritmo del viaje. Septiembre fue un acierto total: hacía calor suficiente para disfrutar de la playa, pero sin el bullicio del verano, y los días largos nos permitieron aprovechar al máximo sin prisas.

malta con niños

Nosotros apostamos por un viaje sin coche y a ritmo slow, priorizando trayectos cortos y lugares donde ella pudiera caminar o jugar tranquila. Malta, aunque pequeña, tiene muchos espacios familiares si eliges bien las zonas. Ya te aviso que una semana en Malta con niños no es suficiente para verlo todo, el ritmo es mucho más lento con peques, pero aun así, se disfruta mucho.

Zonas más family friendly de Malta

Si viajas con peques, las mejores bases son Sliema o Mellieħa, ambas con paseos marítimos amplios y buenos servicios. Sliema tiene un ambiente más urbano, con muchos restaurantes y conexiones por ferry, mientras que Mellieħa es ideal para quienes buscan más tranquilidad y playa. Eso sí, si escoges Mellieħa, te recomieno alquilar coche ya que está mucho  más retirada de los otros atractivos turísticos de Malta.

En Gozo, el ritmo es aún más relajado. Nosotros pasamos dos noches allí y fue la parte más “slow” del viaje: menos tráfico, paisajes rurales y pueblos pequeños donde los niños pueden moverse con libertad.

Las mejores playas de Malta con niños

Las playas de arena son minoría en Malta, pero las hay y muy agradables para niños.

Qué evitar con niños en Malta

Hay lugares muy populares que no recomendamos si viajas con peques pequeños.

  • La isla de Comino y la Blue Lagoon, por ejemplo, investigamos mucho antes para decidir incluirlo o no, y nos pareció que eran poco cómodos: sin sombra, masificación extrema y poco espacio para moverse. Si viajas sin niños y vas solo unas horas en barco, la experiencia puede ser bonita, pero con bebés o niños pequeños es mejor saltárselo.
  • Popeye Village, aunque fotogénico y muy popular, es un lugar prescindible: caro, algo artificial y sin demasiado interés real para los más pequeños.

Actividades y planes familiares que hacer en Malta con niños

Malta se disfruta mejor sin prisas. Es un destino perfecto para alternar días de exploración con otros de descanso, algo fundamental cuando se viaja con niños pequeños. Si tu alojamiento tiene piscina, resérvate al menos un día completo para disfrutarla sin remordimientos: Nara se lo pasó genial chapoteando y descansamos todos. Si tu hotel no dispone de piscina, hay beach clubs repartidos por toda la isla —algunos con acceso directo al mar y zonas familiares— que son una excelente alternativa para pasar un día relajado entre baños y vistas al Mediterráneo.

Entre las actividades que más disfrutamos con Nara estuvieron los paseos por las murallas de Mdina, los trayectos en ferry (¡una aventura para cualquier niño!) o los atardeceres en La Valeta.

Consejo de expertos

Malta no es un destino de grandes parques o atracciones infantiles, pero sí es perfecta para disfrutar de lo sencillo: caminar, explorar, bañarse y descubrir pueblos con encanto. Es ese tipo de lugar donde lo cotidiano —un paseo, un helado o un atardecer frente al mar— se convierte en el mejor recuerdo del viaje.

Dónde alojarse en Malta

Elegir bien dónde alojarse en Malta puede marcar la diferencia entre un viaje cómodo o uno lleno de desplazamientos. Aunque es un país pequeño, las distancias en autobús pueden ser largas y los trayectos algo lentos, así que la zona donde duermas influye mucho en tu experiencia —especialmente si viajas sin coche o con niños y concretamente sin coche y sin niños.

La Valeta, Sliema o St. Julian’s: dónde dormir

  • La Valeta es ideal si buscas un entorno histórico, tranquilo y con encanto. Dormir dentro de las murallas te permite salir a pasear al atardecer cuando la ciudad se vacía de turistas y disfrutarla con calma. Eso sí, el alojamiento es mucho más caro y con menos opciones familiares.
  • Sliema es, para mí, el mejor punto base para moverte sin coche. Está frente a La Valeta, muy bien conectada por ferry y autobús, llena de restaurantes, tiendas y paseos marítimos donde los niños pueden corretear.
  • St. Julian’s es la opción si buscas ambiente nocturno o resorts con piscina y servicios, aunque puede ser demasiado bulliciosa si viajas en familia.

Nosotros nos alojamos con HomeExchange en otra ciudad, pero si no tienes esa posibilidad, elegir un hotel en La Valeta o Sliema es lo más cómodo para moverte por la isla sin coche.

Recomendación top: dormir en Gozo

Dedicar dos noches a Gozo fue una de las mejores decisiones del viaje. La isla tiene un ritmo pausado, menos tráfico y un ambiente rural que contrasta con la isla principal. Además, evitas los traslados de ida y vuelta en el mismo día.

Nosotros nos alojamos en The Duke Boutique Hotel, en el corazón de Victoria, la capital de Gozo, y lo recomendamos totalmente. Las habitaciones son amplias, el desayuno excelente y tiene una terraza con jacuzzi con vistas a la Ciudadela que fue un auténtico regalo después de un día de exploración. Además, está junto a la estación de autobuses, lo que facilita mucho los desplazamientos si viajas sin coche.

donde dormir en gozo

Dónde alojarse en Malta según tu tipo de viaje

Combinar hotel y apartamento en tu viaje a Malta

Nos gusta alternar entre hoteles con servicios (piscina, desayuno, vistas) y apartamentos donde podemos tener más libertad, especialmente cuando viajamos con Nara. En Malta esto funciona muy bien: puedes pasar los primeros días en un apartamento en Sliema o La Valeta para explorar cómodamente, y luego terminar el viaje en un hotel en Gozo con vistas al mar o piscina para descansar.

Gastronomía maltesa: qué comer y dónde

Viajar a Malta es también un viaje gastronómico. La cocina maltesa refleja la historia del archipiélago: una mezcla deliciosa de influencias italianas, árabes y británicas. Aunque la isla es pequeña, se come muy bien si sabes dónde buscar, sobre todo en los pueblos costeros o lejos de las zonas más turísticas.

Platos típicos de Malta que tienes que probar

Pequeños hojaldres rellenos de ricotta o puré de guisantes, el snack más popular de Malta. Los encontrarás en cualquier pastizzeria local y son perfectos para desayunar o picar entre excursiones. ¡Nos encantaron a los tres!

Es el plato nacional maltés. Suele servirse con salsa de vino tinto y hierbas. Lo preparan especialmente bien en restaurantes tradicionales del interior, como en Rabat (lo vimos en muchos restaurantes) o Mdina.

Una especie de bocadillo con pan maltés redondo, relleno de atún, aceitunas, tomates secos y alcaparras. Ideal para llevar a la playa o comer sobre la marcha. ¡Fue uno de nuestros preferidos!

Rollitos de carne rellenos, muy típicos en menús caseros.

En las zonas costeras, sobre todo en Marsaxlokk o Gozo, puedes comer pescado del día, calamares o pulpo a la plancha.

En La Valeta, nos gustó mucho el ambiente de las pequeñas calles laterales donde abundan las terrazas con encanto. La zona de Merchant Street y Strait Street tiene restaurantes modernos, pero también locales más auténticos con buena relación calidad-precio.

En Sliema, hay muchos sitios turísticos, pero si te alejas un poco del paseo marítimo puedes encontrar trattorias locales o bares de tapas con vista al mar.

Si buscas un ambiente más auténtico, Rabat y Mdina son perfectas para probar cocina maltesa casera. En las terrazas con vistas de Mdina se disfruta igual la comida que el paisaje.

Y en Gozo, si te alojas en Victoria, el restaurante Casa Vostra, justo en frente de The Duke Boutique Hotel tiene también una carta exceptional y un ambiente agradable. Comimos una noche allí y salimos encantados ¡una gran recomendación del hotel!

Malta está llena de lugares donde comer bien, pero lo mejor es huir de los locales con menús en diez idiomas y fotos plastificadas. Busca los sitios donde comen los malteses, pide recomendaciones y prueba los platos del día: es ahí donde realmente se saborea la isla.

Malta en una semana: resumen y consejos finales

Si estás planeando una semana en Malta, el itinerario ideal combina historia, paisajes costeros y momentos de desconexión. Dedica unos días a La Valeta y sus alrededores, otro par a Gozo, y si quieres, reserva tiempo para Comino y las playas del sur. Así disfrutarás tanto del patrimonio cultural como del mar, sin prisas.

Qué haría distinto en mi viaje a Malta con niños en una semana

Después de recorrer el archipiélago, creo que la clave está en no querer verlo todo. Malta parece pequeña, pero las distancias y los tiempos de traslado engañan. Si volviera, pasaría más noches en Gozo y evitaría cambiar de alojamiento más de dos veces: menos logística, más disfrute.

También dedicaría más tiempo a las tres ciudades sin rumbo, porque es una de esas zonas donde el encanto está en los detalles y en dejarte llevar.

Mejor época para viajar a Malta

Septiembre me parece el momento perfecto para visitar Malta: el mar sigue templado, los días son largos y el ambiente veraniego persiste, pero sin las aglomeraciones de julio y agosto. Además, los precios bajan ligeramente y se disfruta más de las calas y las visitas culturales.

Cuándo evitar viajar a Malta

Si puedes, evita los meses de julio y agosto, cuando el calor puede ser sofocante y las zonas más turísticas —especialmente La Valeta, Sliema y Comino— se llenan de cruceristas y excursiones organizadas. En invierno, aunque el clima es suave, hay menos ambiente y algunos servicios reducen horarios.

Preguntas frecuentes sobre viajar a Malta

En una semana puedes disfrutar de lo esencial de Malta sin prisas. Dedica dos días a La Valeta, Sliema y Mdina, otro día a recorrer el centro histórico (Rabat, Dingli Cliffs), un par de días para Gozo —más tranquila y auténtica— y una jornada para Comino y la Blue Lagoon, si te apetece un baño en aguas turquesas. Con ese equilibrio tendrás historia, paisajes y momentos de relax.

Sí, viajar a Malta sin coche es totalmente posible. La red de autobuses cubre casi toda la isla y funciona con la app Tallinja, muy práctica para consultar horarios y trayectos. También puedes moverte en ferry entre La Valeta, Sliema y las islas vecinas, o usar apps como Bolt para trayectos puntuales. La única limitación es el tiempo: los trayectos en bus pueden ser lentos, así que conviene planificar las rutas con margen o evitar hacer demasiados desplazamientos en un mismo día.

Sí, Malta con niños funciona muy bien, especialmente si buscas un viaje relajado, con planes sencillos y muchas opciones de baño. Las playas de Mellieha o Xlendi (en Gozo) son cómodas y seguras, y los paseos por Mdina o los acantilados de Dingli son ideales para hacer en familia.
Eso sí, evita Comino o Popeye Village si viajas con bebés o niños pequeños: suelen estar muy masificados y tienen poca sombra.

Lo ideal es pasar una semana en Malta para conocer bien las tres islas principales: Malta, Gozo y Comino. Con 5 días puedes hacerte una buena idea del país, centrándote en la isla principal, pero con 7 u 8 días tendrás tiempo de disfrutar sin prisas, incluyendo un par de noches en Gozo y algún día libre para relajarte en un beach club o piscina.

Depende de lo que busques. La Blue Lagoon en Comino tiene un color de agua espectacular y merece la visita al menos una vez, pero es importante elegir bien el momento. En temporada alta (junio a agosto) suele estar muy masificada, lo que resta encanto. Si puedes, ve temprano por la mañana o fuera del verano, o bien opta por una excursión en barco al atardecer, cuando el ambiente es más tranquilo. Si viajas con niños o prefieres evitar las multitudes, puede que disfrutes más quedándote en Gozo o en alguna playa del norte de Malta.

Más sobre Malta y otras islas

Somos unos auténticos apasionados de las islas y hemos visitado algunas aparte de Malta. Así que en nuestro Blog podrás encontrar muchísima información de muchos más destinos insulares. Te dejamos los más importantes, pero te animamos a que navegues por el blog para empaparte bien de uno de nuestros lugares favoritos.

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