Lo imprescindible que ver en Toledo en un día

Edificio del Ayuntamiento

Otro de los edificios y por el que recibe nombre la plaza, es el del Ayuntamiento. Se trata de un edificio del siglo XVI que destaca por las dos torres, una a cada lado. En el resto del edificio se aprecian innumerables arcos que le hacen tener un aspecto muy castizo. 

Palacio de Justicia

Por último, podemos apreciar también el Palacio de Justicia. Este era el lugar donde vivía el sacerdote que presidía el cabildo de la catedral. Este esquinero edificio pasa más desapercibido. Sin embargo, si te fijas bien en las puertas, lo reconocerás por ser el que posee la entrada más tortuosa.

Iglesia de los Jesuitas

La iglesia de los Jesuitas, también llamada de San Ildefonso está situada en el centro del casco histórico. San Ildefonso es el patrón de Toledo, así que imagina la importancia de este templo. La construcción de la iglesia comenzó en 1629 en el lugar donde se encontraba la casa del conde de Orgaz, seguro que te suena el nombre, y más que te va a sonar en la próxima visita. El interior de esta iglesia es muy amplio, y en ella destaca la cúpula.

Si estás buscando cosas que ver en Toledo en dos días te recomendamos subas a los campanarios. Te encontrarás en uno de los puntos más altos de la ciudad. Puedes ver Toledo desde cualquiera de las dos torres. Pero más interesante aun es observarlo desde la plataforma que las une, en la que te desprendes de las rejas de seguridad. No te lleves a errores, la plataforma tiene barandilla, pero las vistas no están tapadas.

Iglesia de Santo Tomé

Esta iglesia se fundó sobre una mezquita en el s. XI, aunque no fue hasta el s. XIV que tomo el semblante que tiene ahora después de una gran remodelación. Fue el conde de Orgaz el que costeó esta gran reforma. Vuelve a aparecer el nombre Orgaz, pero esta vez va un paso más adelante. Fue en esta Iglesia donde fue enterrado dicho conde, y el Greco quien inmortalizó ese momento en la pintura El entierro del Conde de Orgaz. Bueno, en realidad lo inmortalizó más de 250 años después y tomando como referencia la leyenda que decía que en el entierro del conde aparecían san Agustín y san Esteban. Sea como fuere allí está enterrado el conde con su famosa recreación justo encima.

Sinagoga del Tránsito

Hemos hablado de musulmanes, cristianos, visigodos e incluso romanos. Pero nos faltaba nombrar otra de los grandes colectivos religiosos que también estuvieron en Toledo. Además, los judíos fueron transversales a todas las demás religiones. Convivieron con romanos, visigodos, musulmanes y un poco con los cristianos. Y como no podía ser de otra manera encontramos sinagogas que nos recuerda esa época. La sinagoga del tránsito se edificó en el s. XIV y es de estilo mudéjar. Nos hemos desplazado a la judería, que se encuentra al oeste de la ciudad. Después de la expulsión de los judíos por los Reyes Católicos, esta sinagoga se convierte en una iglesia. Esta iglesia fue llamada del Tránsito por un cuadro del Tránsito de Nuestra Señora que acompañaba el altar.

Este edificio tiene 23 metros de largo y 19 de alto, y hoy en día allí encontramos un museo de la cultura sefardí. Impresionantes los acabados de las paredes y de las columnas, salimos de allí bastante impresionados. La visita al templo la puedes hacer de 9:30h. a 18h. en los meses de invierno, alargándose hasta las 19:30h de marzo a octubre. Los lunes permanece cerrada. El precio es de 3€ excepto sábados a partir de las 14h. y domingo todo el día.

Sinagoga Santa María la Blanca

Otro edificio que ver en Toledo con recorrido muy similar al anterior. Se construyó como sinagoga en el año 1180 y dos siglos más tarde se transformó en iglesia. Hoy en día aunque sigue perteneciendo a la iglesia, se dedica a mostrar exposiciones y eventos culturales. Estructuralmente es otra muestra del arte mudéjar tan utilizado en esta ciudad. Como en el anterior edificio, es fácil quedarse muchos minutos repasando lo elaborado de sus arcos. Aquí volvemos a encontrar una confluencia de religiones ya que fue construida por musulmanes en territorio cristiano y financiada por judíos. En su momento se la conoció como la mayor y más hermosa sinagoga de España.

Si quieres visitar este templo debes abonar la simbólica cantidad de 1,9€. El horario es todos los días de 10h a 17:45h. aunque en los meses de abril a septiembre la hora de cierre se estira 1 hora. Si da la casualidad de que tu visita a Toledo en un día cae en miércoles, por la tarde te saldrá gratis.

Monasterio de San Juan de los Reyes

Este monasterio es uno de los edificios más importantes de Toledo. A nosotros lo que más nos gustó fue su claustro, aunque la iglesia también tiene rincones interesantes. En un principio, este lugar se construyó para que fuera un mausoleo real. Al menos así lo tenían en su cabeza Isabel la Católica. Imagínate si era importante la edificación de este edificio. A la postre, este cometido nunca se llegó a realizar.

Como ya hemos comentado, con lo que más disfrutamos nosotros fue con el claustro de dos pisos. Este espacio se construyó en 1484 y lo más destacado son las cenefas vegetales que decoran el muro. El patio interior del claustro, pese a que no es visitable, nos gustó especialmente. No había demasiada gente, por lo que surgió espontáneamente una buena sesión de fotos.

El horario de visita es de 10h. a 17:45h. todos los días de la semana. En los meses con más luz, de marzo a septiembre, la hora de cierre se alarga hasta las 18:45h. El precio de la entrada es de 2,80€.

Alcázar de Toledo

Seguramente sea la estampa más icónica de cualquier foto que uno ve en internet sobre Toledo. Se trata de una fortificación que vigila toda la ciudad desde lo alto de un monte de rocas. A pesar de que su nombre proviene de la palabra árabe Al-Quasaba, la apariencia no nos lo parece. Es normal, ya que Alfonso X le dio un carácter nuevo al remodelar la fachada y sobre todo al añadir las cuatro torres. No fue la única remodelación, ya que al parecer cada rey quería darle su toque personal, incluidos los Reyes Católicos y Carlos I. Después de varios incendios y conflictos, no fue hasta finales del s. XIX que se finalizó su reconstrucción. Todavía le quedaba una última reconstrucción después del asedio que sufrió durante la Guerra Civil Española.

Desde 2010 el Alcázar de Toledo es la sede del Museo del Ejército. Es complicado concebir una visita a Toledo sin al menos contemplar este trozo de historia. Ten en cuenta que desde la época romana aquí ya se levantaba un emplazamiento fortificado. El horario de visita es de 10h. a 17h de martes a domingo. La entrada cuesta 5€, si incluyes la audiología tendrás que pagar 8€.